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Sacramento del Orden Sagrado 

EL SACRAMENTO DEL ORDEN SAGRADO.

El nombre:

La palabra orden viene del latín "ordo"

En un sentido amplío y genérico, cabe distinguir en la Iglesia dos grandes órdenes: el de los clerigos,el de los laicos o seglares.

 

En sentido estricto se reserva la palabra orden para designar la categoría o grupo de personas que tienen preeminencia en la comunidad cristiana, o sea, las que están oficialmente consagradas a la misión de santificar, adoctrinar y regir al pueblo cristiano. Orden viene a significar la clase rectora de la Iglesia, o sea, la jerarquía eclesiástica.

 

Definición:

Es un sacramento de la Nueva Ley instituido por el mismo Cristo por el que se confiere la potestad espiritual y la gracia necesaria para el recto desempeño de los ministerios eclesiásticos.

 

EXISTENCIA:

Sgda. Escritura.

Consta claramente en el Evangelio que Cristo ELIGIO a los apóstoles, dandoles poderes sobre los demás fieles: Mt 4,19; Me 3,13-15; Lc 6,13; Jn 15,16 en orden a la eucaristía: Lc 22,19 al perdón de los pecados: Jn 20,22 a la enseñanza y administración de los sacramentos: Mt 28,18-20

 

Los apóstoles conciertes de que este poder debía perpetuarse en la Iglesia hasta el fin de los siglos, transmitieron a sus sucesores estos poderes a traves de un signo visible y externo: imponiendo las manos sobre los elegidos (heh 6,6; 13,3; 14,22; 1Tim 4,14; 2Tim 1,6); constituyendo presbíteros y obispos para gobernar las iglesias (Hch 14,22; 20,28); para administrar los sacramentos y vigilar la doctrina y fomentar las buenas costumbres (1cor 4,1; 1Tes 3,2; 1Cor. 4,17; 1Tim 1,1-12

 

Magisterio:

Lo enseñó a todo lo largo de los siglos y lo definió expresamente en el Concilio de Trento (Dz 949; 961; 963)

 

De qué manera INSTITUYO CRISTO este sacramento:

Se trataría en este caso no de una institución específica (en especie in-

, fina) sino genérica, en virtud de la cual Cristo hubiera determinado el sig­no externo para conferir el sacramento, dejando a la Iglesia el cuidado de señalar todos los demás detalles y circunstancias.

 

UNIDAD:

A pesar de las diferentes partes de que consta, EL SACRAMENTO DEL ORDEN ES ESENCIALMENTE UNO SOLO.

No se trata de partes integrales (Ej. en un edificio: cimientos, muro... No se trata de partes subjetivas o especies distintas de un género (El en el género animal, las especies de león, caballo, perro...)

SON PARTES POTENCIALES DE UN TODO en el que se encuentra en toda su ple­nitud.

  • La TOTALIDAD O PLENA PERFECCION reside en el EPISCOPADO

  • Las DEMÁS ORDENES (Presbiterado y diaconado) participan más o menos de esa perfección

 

EN SINTESIS:

ES UN SACRAMENTO CUYA POTESTAD SE VA PARTICIPANDO GRADUALMENTE.

 

EPISCOPADO:                    9 ;

La palabra obispo proveniente del griego significa, etimológi­camente, guarda, protector, inspector. Los paganos aplicaban este nombre a los dioses que defendían y protegían sus hogares. Entre los atenienses era la palabra técnica para designar a los prefectos de las colonias. En la Iglesia católica designa a los que han recibido la plenitud del sacerdocio y se les ha confiado el cuidado y gobierno de una provincia de la Iglesia, que recibe el nombre de Diócesis.

 

El espiscopado constituye UNA VERDADERA ORDEN SACRAMENTAL DISTINTA Y SUPE­RIOR a la del simple sacerdocio, e imprime, por consiguiente, UN CARÁCTER DISTINTO al del simple sacerdocio

Sgda Escritura: 2 Tim 1,6; cf. 1Tim 4,14) Consta historicamente que Timoteo había recibido la consagración episcopal. Luego la consagración episcopal infunde gracia y como no se puede infundir gracia sin el carácter en los sa­cramentos que imprimen el mismo, síguese que en la consagración episcopal se recibe un carácter especial distinto.

Los ministerios que se han conservado, acomodados a las necesidades actuales u no reservado para los aspirantes al sacramento del orden son dos:

EL MINISTERIO DE LECTOR:

Su función es leer la palabra de Dios en las reuniones litúrgicas. Ademas, en ausencia del salmista, lo recitará él; cuando no haya diácono o cantor, publicará las intención de la oración universal. Será moderador del canto y dirigirá la participación del pueblo fiel. Instruirá a los fieles para que reciban dignamente los sacramentos.

Para desempeñarse con mayor aptitud y perfección meditará con frecuencia las Sagradas Escrituras.

 

EL MINISTERIO DE ACOLITO:

Su función es ayudar al diácono y al sacerdote en el servicio del altar.

Le corresponde, además, destribuir la sagrada comunión como ninistro extraordinario. Con idénticas circunstancias extraordinarias se le podrá encomendar que exponga públicamente el Santísimo Sacramento y que lleva la comunión a los enfermos o impedidos en sus hogares.

Ejercerá dignamente estas funciones si dia a día se esmera en la participación de la sagrada eucaristía con piedad más fervorosa, se alimenta con ella y alcanza un conocimiento más perfecto de la misma.

Los candidatos al diaconado y al presbiterado, deben recibir los ministe­rios de lector y acólito y ejercerlos durante un tiempo adecuado, para disponerse mejor a los futuros oficios de la Palabra y del altar.

 

ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DEL SACRAMENTO DEL ORDEN:

La constitución Apostólica de Pio XII "Sacramentum ordinis", del 30 de noviembre de 1947 declaró definitivamente en que consistía la materia y la forma de los tres órdenes sagradas:

MATERIA: La imposición de las manos del obispo

 

FORMA: Episcopado:

"COMPLETA EN TU SACERDOTE LA SUMA DE TU MINISTERIO Y, PROVISTO DE LOS ORNAMENTOS DE TODA GLORIFICACION, SANTIFICALO CON EL ROCIO DEL UNGUENTO CELESTE"

 

Presbiterado:

"TE PEDIMOS, PADRE TODOPODEROSO, QUE CONFIERAS A ESTOS SIERVOS TUYOS
LA DIGNIDAD DEL PRESBITERADO; RENUEVA EN SUS CORAZONES EL ESPIRITU

 

DE SANTIDAD: RECIBAN DE TI EL SACERDOCIO DE SEGUNDO GRADO Y SEAN CON SU CONDUCTA EJEMPLO DE VIDA".

 

Diaconado:

"ENVIA SOBRE ELLOS, SEÑOR, EL ESPIRITU SANTO, PARA QUE, FORTALECIDOS

CON TU GRACIA DE LOS SIETE DONES, DESEMPEÑEN CON FIDELIDAD

SU MINISTERIO"

EFECTOS DEL SACRAMENTO DEL ORDEN

 

La gracia sacramental:

A quien se le da una potestad, se le dan también los medios para usarla dignamente. Ahora bien: así como la gracia santificante es necesaria para que el hombre reciba dignamente los sacramentos, de igual modo lo es para su dig­na administración. Luego en el sacramento del orden se la recibe para la dig­na administración de los sacramentos.

El matiz o modalidad especial de la gracia en el sacramento del orden es conferir una fuerza o vigor especial para ejercer convenientemente sus funciones ministeriales y el derecho a los auxilios actuales que irá necesitando a todo lo largo de su vida para el recto desempeño de esas mismas funciones.

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